En comparación al tradicional pastel de queso, la torta de requesón posee deliciosas características que la hacen mucho mejor, como por ejemplo, es mucho más blanda cuando hace contacto con la saliva y posee una textura un poco más cremosa.
Es hora de preparar algo totalmente diferente, que sea saludable para nuestro organismo y que además posea un sabor exquisito cuando sea devorado por nuestra boca. Estas características las cumple de manera completa el pastel de requesón.
Sin duda alguna, este tipo de pastel posee grandes beneficios al momento de prepararlo, ya que además de que es súper fácil de preparar, también lo podemos crear sin utilizar el horno ¡Y sí! El resultado sigue siendo el mismo.
Ingredientes:
- 400 gramos de requesón
- 400 ml de nata para montar
- 100 gramos de azúcar
- 2 sobres de cuajada
- 300 gramos de galletas tipo María
- 120 gramos de mantequilla
- 3 hojas de gelatina
- 250 gramos de mermelada de frutos rojos
Preparación:
Para comenzar debes agregar papel de horno a ese recipiente en el que cocinaras el pastel de requesón sin horno. Luego comienza a triturar las galletas, al finalizar coloca el resultado en un bol que tenga profundidad. Tras este paso, procede a derretir la mantequilla en un sartén, cuando hayas culminado con esto, entonces agrega las galletas y forma una mezcla, que usarás como base para la tarta de requesón.
Esta mezcla de galleta y mantequilla, la colocarás directamente en el molde donde irá el paste, luego guárdala en el refrigerador y espera dos horas para que se endurezca… Mientras calienta la mitad de la nata a fuego medio, mientras que la otra la viertes en un bol para mezclarla junto con la cuajada.
Cuando la nata que está en el fuego comience a hervir, debes agregar la mezcla que has realizado con la cuajada, mientras lo haces no debes dejar de remover, cuando ya esté a punto de hervir apaga el fuego y continúa removiendo por 30 segundos más.
Cuando toda esta mezcla esté lista entonces comienza a batirla junto con el requesón y la azúcar, hasta conseguir una mezcla sin grumos. Luego procede a esparcir la mezcla sobre la base de galleta y mantequilla, la cual ya debería estar endurecida. Al finalizar metela en el refrigerador por dos horas más ¡Eso es todo! Si deseas puedes agregar mermelada de tu preferencia encima de la tarta.